"Es una historia muy triste, pero también es muy rara. No entiendo nada."
Ese fue el primer comentario de mi hijo con la lectura de este libro.
Y es que hay una historia principal y otra de fondo. Una historia que muestra una triste realidad y otra bastante descabellada, que al principio nos dejó descolocados.
Se trata del libro Mehdi y las lunas del zoo, escrito por Gabriel Janer Manila y editado por Edebé.
En los tejados de los lujosos edificios de una gran ciudad viven personas que no existen porque no tienen papeles, son ilegales.
Una de estas personas es el niño Mehdi, que entre líneas nos va contando cómo él y su familia tuvieron que dejar su aldea y vendieron todo lo que tenían para poder llegar a algún lugar del norte buscando una vida mejor.
Así acabaron en una especie de mundo paralelo, casi invisible para los demás.
Pero la historia que sobresale en el libro es la disparatada aventura de Mehdi y su camello Gaspar, al que rescató del zoo y se llevó a su casa.
A partir de ahí es todo bastante... surrealista, absurdo, estrambótico. Muy diferente a la dura historia que hay de fondo.
Ya empezado el libro (que B quiso leerme en voz alta) leí reseñas en las que se explicaba que aquello que a nosotros nos parecía ilógico eran en realidad metáforas que hablaban de otra cosa y el camello era el símbolo de una zona geográfica y una determinada cultura.
Después de eso volví a la lectura con otra perspectiva y entendí mejor el significado de las jaulas del zoo y otras serie de cosas.
Pero mi hijo no fue capaz de percibir ninguna de esas metáforas y leía las locas aventuras tal cual estaban escritas. Aunque tengo que decir que eso nos trajo ratos muy divertidos y le hizo soltar algunas risas. Para alguien como él hubiera sido más atractivo centrarse en la realidad de Mehdi y comprender cómo viven otras personas.
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