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11 de diciembre de 2018

Reflexión sobre los libros para niños mayores


Hasta el momento, mi hijo no es muy aficionado a la lectura.
Buscando libros que le puedan gustar (ya que él no pone mucho empeño en elegir) me he dado cuenta de varias cosas:

Los libros clásicos, tan elogiados, no gustan a todos los niños.
Nosotros lo hemos intentado varias veces sin éxito.

Dentro de los libros más actuales, he visto una gran diferencia según la edad a la que van dirigidos.
Los títulos para los más pequeños suelen estar muy cuidados. Preciosas ilustraciones y bonitos textos. Además de tocar temas interesates.

A medida que avanza la edad recomendada, la temática de los libros más populares (los más vendidos, los más leídos... que son los criterios a seguir cuando vas un poco a ciegas) va perdiendo calidad.
No quisiera generalizar, sé que hay libros extraordinarios para los más grandes, pero una gran parte de las cosas que he visto pierden en calidad literaria al comparar con las lecturas dirigidas a los más peques.
Entramos en temáticas absurdas y superficiales y muchas veces rozando el mal gusto o incluso la mala educación.
¿Alguien más tiene esa impresión?

Así es que aquí voy, mirando con lupa y procurando elegir (proponer, no obligar) bien porque no se trata de leer por leer ni leer cualquier cosa. Sino algo que aporte conocimientos, buenos valores o belleza.

El libro de la foto superior es el último que ha leído. Un libro precioso.
El niño que no sabía jugar al fútbol, escrito por Ernesto Rodríguez Abad, ilustrado por Víctor Jaubert y editado por sm (colección El barco de vapor).
Cuenta la historia de Rodolfo y habla mucho de sentimientos, de cómo se sienten las personas que no son como los demás y de que todos somos únicos y especiales.
Es una historia triste a veces, pero con final feliz (como debe ser para un niño) que nos ayuda a aceptar a los demás tal como son y también aceptarnos a nosotros mismos y saber valorar lo bueno que tenemos.

Ahora ha comenzado un nuevo libro y lo está disfrutando mucho. Le hace reir y pasar buenos ratos, todo un logro. Ya escribiré sobre él.


2 comentarios:

  1. Hola Maribel.
    Es que lo de leer es algo tan personal... A mi hijo por más que le propongo libros nunca le gusta nada, así que nada lee. Sin embargo si que les he leído a todos libros clásicos y le gusta escuchar. Su hermana sin embargo devora los libros, lee dos libros por semana de los gruesos (casi 300 páginas) y aparte devora todo lo que cae en sus manos. A la mayor sólo la vi leer un año en toda su vida, leyó varios libros de Gerónimo Stilton (que a mí no me gustan nada) pero cómo era lo único a lo que se enganchaba pues le compré unos cuantos y la pequeña (que aún no lee), tampoco se engancha con los clásicos.
    Ya ves cada uno es un mundo.
    El libro del niño que no le gusta el futbol me parece muy interesante, seguro que mi hijo se siente muy identificado, voy a buscarlo en la biblioteca.
    Un beso muy grande.

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    Respuestas
    1. El libro que menciono es muy bonito, pero creo que para leer juntos o al menos para comentar juntos después porque toca sentimientos a veces muy tristes.
      Tenemos en casa una pila de libros que nos ha dejado mi hermana, pero él sólo lee si se lo incluyo en las tareas del día. Incuso en libros que le gustan... Bueno, tiene variedad al alcance de la mano, más no puedo hacer.
      Lo que sí veo es que en ocasiones coge algún libro de consulta (tampoco tantas veces, no es para tirar cohetes...)sobre algo que le interese en ese momento. Tiene un libro en francés, que nos trajimos de Bélgica, sobre los alimentos y ese sí que lo abre con cierta frecuencia para mirar cosas.
      Ya ves, le observo para tener más pistas e imaginar qué temáticas comprar la próxima vez.
      Besos

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